LUIS ZANINNI

14-05-2010 "La voz de San Telmo"

Apenas uno ve el rostro de Luis Gastón, el de José Luis (papá) y el de Analía (mamá), se da cuenta que todo lo que vivieron hace menos de dos semanas. En la noche del sábado del Día del Trabajador, intentó ayudar a un amigo al que estaban golpeando un grupo de violentos y allí, Luis recibió un navajazo en el abdomen. Por la herida debieron operarlo de urgencia y sacarle el bazo sanguíneo. Una semana después y gracias a la fuerza de su juventud, le dieron el alta en el Hospital Argerich para hacer la recuperación en su casa, junto al incondicional amor de sus padres y de su hermana.
“Fuimos con mis amigos a una matiné, una fiesta para juntar fondos para un viaje de egresados. Nos aburrimos un poco y decidimos irnos para casa antes de la medianoche. De pronto veo a uno de mis amigos al que lo estaban golpeando en el piso, muy feo. Salí a defenderlo y de pronto uno me tiró un navajazo. Me asusté mucho. Por suerte me llevaron rápido y tengo que agradecer el trato y el profesionalismo de todos en el Hospital Argerich”, cuanta Luis Gastón Zannini en el comedor de su casa, jugador de nuestra Séptima División.
“Vivimos unos días muy difíciles. De muchos nervios, esto te descompagina todo. Luis nunca sale a ningún lado, se cuida mucho como un profesional porque tiene claro a dónde quiere llegar”, nos contó José Luis, su papá.
Enseguida el rumbo de la charla cambia y el tono se transforma cuando aparece el tema que más apasiona a los Zannini, el fútbol. Todos ellos son hinchas de Independiente, viven cerca de la cancha, en Gerli, y al toque los temas van surgiendo solos…
“Empecé desde muy chiquito en el baby fútbol de mi Club de barrio, el “Estrella de Echenagusía”. De ahí surgieron dos jugadorazos de los más conocidos, la “Gata” Fernández y el “Caño” Ibagaza.
“Juego en cancha de once desde los cinco años. Jugué en Arsenal de Sarandí hasta que a principios de 2009 me probé en San Telmo y tuve la suerte de quedar”
Lo que no cuenta Luisito, quizás por su humildad, lo cuenta con orgullo su papá: “Luis fue preseleccionado para la Selección Sub-15 que dirigía el Negro Enrique. Pasó varias pruebas, fuimos muchas veces al predio de la AFA en Ezeiza y fue quedando hasta los mejores 30, después muchos quedaron porque tenían representante y Luis no”.
Luis Zannini es muy querido por todos los jugadores de San Telmo de su Séptima División, casi los mismos que tuvo en 2009 en Octava y es muy considerado por el entrenador, el histórico Juan Carlos Vega. Muchos de los especialistas en inferiores no dudan en afirmar que Luis Zannini es un jugadorazo y que tiene un gran futuro. Sorprende su altura, con apenas 15 años pasa el metro ochenta y casi se tiene que agachar para ingresar por la arcada para entrar a la cocina de su casa.
Fuimos recibidos de una manera muy cálida y cordial y una muy linda sonrisa esbozó cuando abrió el sobre y extendió la camiseta de San Telmo que todo el plantel profesional le firmó con dedicatorias el sábado, antes de la victoria ante Morón.
La exhiben mamá Analía, Luisito y José Luis, el papá. De fondo, en la pared del living está el banderín gigante de San Telmo y la camiseta enmarcada de su primer Club, el Estrella de Echenagusía.
“No estoy acostumbrado a estar tantos días sin hacer nada, camino por las paredes. No veo la hora de volver a entrenar”.
Falta poquito Luis. Estamos muy contentos de que esté bien. Toda la suerte del mundo. La familia del Club Atlético San Telmo.
Publicado por La Voz de San Telmo, Jueves 13 de Mayo 2010